Las internas entre el frente de Gobierno no ceden. Ahora fue Fernando "el Chino" Navarro quien, intentando respaldar al presidente Alberto Fernández, también terminó cuestionándolo. El dirigente había dicho que Máximo Kirchner no debería olvidar que su padre también negoció con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y que también tejió alianzas con sindicatos y organizaciones sociales.

Pero las palabras del Chino Navarro fueron directo al proceso electoral dentro del partido. Aseguró que hay que controlar identidades, que solo se afilia para conseguir congresales. Y que en el Partido Justicialista se dice que votan 500 mil personas pero que nadie va a votar, además de que hay gente que está afiliada y no lo sabe. Mientras tanto, el canciller Santiago Cafiero habló de una "discusión virtuosa" dentro del partido. Y pidió sacar el foco de ahí.

Fue la voz de una estrategia para parte del Gobierno. Modificar el discurso que ubica a la propia vicepresidenta, Cristina Kirchner, del otro lado del ring. Navarro señaló la cantidad de encuentros del Presidente agendados durante su visita a Europa con distintos líderes mundiales, y cuestionó a Macri por asegurar que creía que para tener esas reuniones había que ser un arrastrado frente al mundo.

La idea es volver a poner a Macri como el centro de las críticas para sacar del eje las peleas internas dentro de la propia coalición.