
Cansado de la falta de respuestas oficiales, un vecino de América decidió advertir a los conductores sobre los peligrosos pozos de la Ruta Nacional que une Bahía Blanca con Rosario. Con pintura blanca y mucha paciencia, marcó los cráteres de la calzada para evitar accidentes. Su iniciativa generó un fuerte impacto en la región.