Se trata de equipos de alto flujo adquiridos por el Ministerio de Salud; se utilizan como una manera diferente de administrar oxígeno, fundamentalmente en patologías como la bronquiolitis

Consultado el doctor Javier Fraire, jefe del área de Pediatría del establecimiento, comentó que permite utilizar concentraciones más altas de oxígeno y a flujo más alto. “La patología número uno en la cual se utiliza es la bronquiolitis, no es la única pero es la más importante" resaltó Fraire, “veníamos utilizando otro sistema y estos equipos nos simplifican mucho el trabajo. Es incorporar nueva tecnología, que desde hace algunos años se utiliza en el mundo, para tratar las enfermedades respiratorias”.

“Las patologías a lo largo de este invierno se han mantenido en números como el año anterior”, continuó el profesional, añadiendo que “la transmisión de la patología respiratoria depende mucho de cómo se maneje la población, más allá del accionar médico. En este sentido, las campañas de difusión del correcto lavado de manos, no concurrir a la guardia si no es necesario, evitar lugares hacinados con gente enferma, no mandar al colegio a un niño si está enfermo para no contagiar a sus compañeros,  son medidas que la población ha tomado mayor conciencia y esto contribuye al cuidado de la salud de manera permanente”.