Tres ciudades y un sicario detrás del crimen del hotelero en Villa María
Se cree que empresarios de Villa Carlos Paz le pagaron a un ciudadano santafesino para que viaje hasta Villa María y cometa el asesinato. Hay cuatro detenidos, dólares y vehículos secuestrados.
VILLA MARÍA | Empiezan a conocerse más detalles de la trama que gira en torno a la muerte de Gabriel Alejandro Piedecasas (55), el hombre que fue ultimado de seis balazos el sábado 12 de abril en pleno centro villamariense.
Todo indica que hubo una minuciosa organización para cometer el crimen, con varios sospechosos y un triángulo que unió a las ciudades de Villa Carlos Paz, Arequito (Santa Fe) y Villa María.
Desde la ciudad serrana del Valle de Punilla se orquestó el plan y se bajó la orden de dar muerte al empresario hotelero.
El camino del asesinato también conduce a una localidad del interior de Santa Fe, donde reside el hombre al que contrataron para ejecutar a Piedecasas.
La última punta del triángulo es Villa María, hasta donde llegaron al menos dos personas (podrían haber sido más) para concretar el macabro plan que ahora es motivo de investigación.
Cuatro detenidos
En el marco de esta causa, personal policial realizó múltiples allanamientos en las horas posteriores al asesinato.
Los procedimientos, coordinados por la fiscal Juliana Companys, fueron motorizados por la División Investigaciones de la Unidad Regional Departamental General San Martín.
También colaboraron con los mismos el Departamento Homicidios Córdoba, el grupo E.T.E.R., la D.I.O., y la Policía de Santa Fe.
A 24 horas del crimen, y ya habiendo reunido varias pruebas, Companys ordenó la materialización múltiples allanamientos en Villa Carlos Paz.
Fue en ese marco que uniformados detuvieron a dos hombres de 53 y 54 años, sindicados como presuntos autores del homicidio.
Además, en la villa serrana, se procedió al arresto de un tercer hombre de 50 años, acusado por el presunto delito de encubrimiento.
En los domicilios allanados, según se informó, se secuestraron prendas de vestir, celulares, documentos, 1,7 millón de pesos, 4.700 dólares, cartuchos de distintos calibres, un Peugeot 408 y una pick-up Nissan, vehículos que estarían vinculados al hecho.
Las pistas recolectadas también condujeron a Arequito, donde en las últimas horas fue detenido un hombre de 28 años, también acusado de homicidio calificado.
En la vivienda del presunto sicario, uniformados incautaron más celulares y prendas de vestir de importante interés para la causa.