
Luego del duro revés electoral del domingo, en el que la Unión Cívica Radical (UCR) pampeana perdió su única banca nacional y no logró imponerse en ninguna localidad, el partido comenzó un proceso de introspección y reacomodamiento político. Mientras algunos dirigentes hablan de una necesaria autocrítica, otros ya se enfocan en tejer alianzas con La Libertad Avanza (LLA) y el PRO para intentar poner fin en 2027 a más de cuatro décadas de hegemonía peronista en La Pampa. Claramente si el radicalismo no busca morir electoralmente en La Pampa, deberá integrarse a un gran frente político que fácilmente podrá arrebatarle finalmente el gobierno al "peronismo" pampeano, que en las elecciones del domingo apenas pudo imponerse por un agónico menos de un punto, refrendando una baja constante de su caudal electoral.













































