Ayer, en Tribunales de general Pico, la pareja fue formalizada y quedó en libertad. Son investigados por el delito de "portación de municiones de guerra"

El hecho ocurrió el día miércoles por la mañana en el puesto caminero de la localidad de Realicó, donde personal a cargo del operativo de ruta detuvo a una pareja que llegaba procedente desde Córdoba. 

Luego de solicitar la documentación del automóvil uno de los oficiales observó una mochila en el interior del auto y dentro de ella una caja metálica. Al consultarle al conductor qué había en el interior de la mochila este respondió que contenía “hierro”.

El procedimiento contó con la participación del nuevo coordinador de Lucha contra el Narcotráfico, el Comisario Inspector José Giordano, personal de Toxicomanía de la UR II, junto al comisario inspector, Andrés Aranguez y personal de la departamental de Realicó.

El secuestro en el operativo llevado adelante este pasado miércoles, incluyó balas para Fusil FAL de tipo simple y trazante, proyectiles para mortero, otros elementos explosivos, accesorios para su encendido, una caja metálica para el transporte de municiones, indumentaria como gorras militares de verano e invierno, mochilas tácticas, buzos del Ejército, remeras y hasta algún mapa. La pareja que trasladaba los elementos se movilizaba en un pequeño auto marca Chery modelo QQ de color gris y llevaba como destino la capital pampeana, lugar de origen de ambos.

Luego de la formalización el Fiscal de la causa reveló que el conductor dio su versión de los hechos y aseguró que fueron a vacacionar a Córdoba, donde vive su primo hermano, quien sería militar y le habría pedido el favor de traer la mochila a nuestra provincia ya que el viajaría mas adelante y no tendría lugar para traerla. El hombre indicó que no sabían que contenía en su interior. 

Por otra parte el funcionario judicial afirmó que se comunicará al Regimiento de Córdoba sobre la situación para que el organismo inicio una investigación ante un posible robo de elementos del Ejercito. 

El Fiscal Campos sostuvo que el Comisario Portillo fue el encargado de acercar información sobre el material encontrado y recomendó la detonación por cuestiones de seguridad.  “Hoy me informó que se trata de proyectiles que son utilizados para prácticas debido a su tamaño, pero que no dejan de ser riesgosas, ya que una vez que salen del ejército pueden ser manipuladas y rellenadas con cualquier tipo de contenido” declaró en diálogo con el portal Infopico. Ese procedimiento se realizó ayer.

 En lo que respecta a los pasos a seguir, se procedió al secuestro de los teléfonos celulares, donde se espera se pueda acreditar el relato que ambos dieron sobre el desconocimiento de los proyectiles.

En ese sentido, el fiscal fue consultado sobre las consecuencias legales que podrían tener la pareja y explicó que, en primer instancia, se deberá evaluar si se trata de personas que pretendían acopiar municiones. No obstante, adelantó que en el allanamiento que se realizó en el domicilio de ambos no se encontró nada que pueda indicar que se trata de acopiadores.

“Vamos a tratar de ver si los proyectiles de los morteros tienen la condición de material explosivo, porque en ese caso tiene una connotación jurídica distinta. La simple tenencia de pocas municiones no tiene ninguna consecuencia, tiene que ser una cantidad tal que dé a entender que la persona acopia ilegalmente proyectiles“, declaró Campos. 

(Con parte de información de InfoPico - Fotos: InfoTec 4.0)